FMF - Foro de Mineralogía Formativa

[Cesar M. Salvan]

Aprovechando la publicación de nuestro artículo sobre los minerales de mercurio de Usagre en Mineralogical Record, y también una curiosa noticia sobre un ridículo intento de envenenamiento con mercurio en un torneo de ajedrez en Rusia, estuve haciendo algo de divulgación sobre minerales de mercurio y el mercurio en general.

Planteaba a las personas interesadas un experimento didáctico para visualizar cómo el mercurio se evapora realmente y me han pedido que lo comparta aquí, por si a alguien le resulta interesante. El metal en sí es poco tóxico, pero sus vapores sí son tóxicos; si son respirados en gran cantidad o en una exposición crónica, son un neurotóxico con un efecto acumulativo.

¿Cómo podemos ver el mercurio evaporándose? aquí, como en tantas cosas en ciencia, lo importante es la luz que no podemos ver.

El vapor es invisible a simple vista. Pero si montamos una pantalla fluorescente a ultravioleta de 254 nm y lo iluminamos con una lámpara a esa longitud de onda, podemos revelar el vapor formando curiosas nubecillas, con un aspecto misterioso y fantasmagórico. He hecho el experimento usando placas de cromatografía en capa fina a modo de pantalla fluorescente, y funciona muy bien.

Esto es debido a que el vapor de mercurio absorbe fuertemente la luz de 254 nm, invisible para nuestros ojos. Cuando el vapor se interpone entre la lámpara y la pantalla, absorbe luz, creando las sombras misteriosas que véis. En cierto modo, es como revelar un "fantasma".

Ya veis que el mercurio emite vapor incluso a temperatura ambiente. Aunque el experimento es muy simple, no deja de ser sensible. Este montaje casero permite detectar fácilmente 1 miligramo de mercurio disuelto en un litro de agua. Os lo mostraré en otro "episodio".

Además, nos muestra otro principio, que es el de la espectroscopía de absorción, en la que una molécula o átomo absorbe luz a longitudes de onda específicas, revelándo su presencia y permitiendo su análisis.

En este caso hablamos de espectroscopía de absorción atómica: los átomos de mercurio absorben luz a 254 nm, permitiendo su detección y, con el aparato adecuado, su cuantificación en una muestra.

No hay que asustarse. En realidad el vapor que veis en el vídeo es una cantidad ínfima. La toxicidad por vapor de mercurio se presenta en una exposición crónica, lo que se llamaba "azogado".

El cuadro clásico de toxicidad, que sufrían trabajadores expuestos diariamente al mercurio, consistía en unos síntomas similares al Párkinson, alteraciones cognitivas y de personalidad que podían terminar en demencia, acompañado de estomatitis y otros daños gastrointestinales o renales.

Pero, como siempre decimos: depende de la dosis y la exposición.
Si se te rompió un termómetro y jugaste con las bolitas, no pasa nada.

[Jordi Fabre]

Qué lujo tenerte aquí Dr.!