FMF - Foro de Mineralogía Formativa

[Carles Curto]

El martes por la tarde Munich nos recibe con tiempo nublado y amenaza de lluvia. El frío se deja notar pero no es nada comparado con las amenazas de nieve y temperaturas bajo cero que anunciaban los partes climatológicos.
El miércoles por la mañana nos acercamos, a la Mineralientage y, como cada año, nos asombra la extensión de las salas (en la foto solo cabe una, y muy a duras penas, pero son tres) de por sí es considerable pero que se hace mucho más evidente cuando están vacías. Los primeros comerciantes chinos y marroquíes van apareciendo y empiezan a desenvolver y extender sobre las mesas su mercancía. La Mineralientage estira sus brazos y va desperezándose. No es quizás el mejor momento para hacer las primeras adquisiciones (¿o sí?) pero se le va tomando el pulso a la feria.
El jueves, la mañana nos sorprende con un día claro y radiante, en la recepción del hotel nos anuncian que habrá “fohn”, un viento fuerte, parecido a nuestra tramontana, que en algunos (y es mi caso) provoca fuertes dolores de cabeza. En la feria la animación del montaje es ya “salvaje” y hay que vigilar las espinillas y los pies, que peligran con los carros, carritos, carrazos y palets. Se notan los primeros movimientos importantes de transacción y particularmente me encuentro con los primeros colegas de museos europeos. Según parece, en general está cundiendo el desánimo. Aparecen también nuestros amigos y conocidos coleccionistas. Al fin, de “föhn” nada de nada, solo una ligerísima brisa.

[Carles Curto]

Viernes es el gran día. Libre aún de los esperados agobios de las visitas familiares y de grupos, aún es posible tomar notas avistar ejemplares y preguntar precios con calma. Se nota cierto desespero entre los comerciantes chinos, que nos persiguen, calculadora en ristre, con sus ofertas, los pakistaníes e indios, como los europeos, quizás más curtidos, mantienen la calma.
Por la tarde la reunión de la SMMP (Society of Mineral Museum Professionals), muy concurrida, destaca en general una importante pérdida de peso de la mineralogía en los staffs y departamentos y se nota claramente que los esfuerzos se están dirigiendo a las bases de datos y recuperación y consolidación de datos de las colecciones de minerales del país.

El sábado por la mañana, día de Todos los santos, lo dedicamos a disfrutar de un agradable solecito (sensacional, ¡y anunciaban nieve!) y hacia el medio día nos dirigimos de nuevo a la feria. Algo cansados (en un día de feria puede llegarse a andar entre siete y diez kilómetros tranquilamente).
Aunque está animada hay menos gente de la esperada, ignoramos si debido a la crisis o a que el buen tiempo ha llevado a los lugareños al monte. A media tarde se pueden intentar mejoras substanciales en los precios, fáciles con los indios y chinos, no tanto con los marroquíes y complicado con los pakistaníes. Los europeos suelen ofrecer pequeños redondeos sin demasiada discusión (a la primeras de cambio, vaya).

[Carles Curto]

Como ya se ha destacado, pocas novedades. Las Olmiitas a precios disparatados (veremos que sucede el año próximo) y poca cosa más.
Destaco alguna Xenotima de Pakistán (en toda la feria pude ver siete) pequeñas, sin matriz (algo ususal en esta especie) pero de excelente color y translucidez. Por primera vez en años se ha visto, en uno de los estands “overseas” Crocoita de cierta calidad y con cierta abundancia a precios razonables. En otro estand algo alejado los ejemplares eran mucho peores y ostentosamente más caros.

En todo caso, el dominio del material asiático, especialmente de China y Pakistán (se ve menos material indio), es abrumador, mientras que la oferta marroquí, muy generosa en cantidad, ha rebajado su calidad hasta límites insospechados.
Por cierto y a raíz del “affaire” de la Plata “nativa” se veían pocos ejemplares de esta sobre las mesas pero a la menor insinuación salían de “debajo de los manteles”, como por arte de magia y en cantidades fabulosas. Un nuevo Potosí.

Los precios son cada vez más fantasiosos pero ofrecen a los buscadores pacientes oportunidades de excelente relación calidad-precio. Aparte de algunos precios disparatados se hecha en falta un franja media-alta. No hay demasiado problema en encontrar material entre los 50 y los 250 €, pero a partir de esta cifra hay un claro salto hasta los 800 y para arriba. Claro que hay ejemplares sobre los 300, 400 o 500 €, pero suele tenerle precio sobredimensionado y resultan poco satisfactorios. Los pakistaníes (en general) este año tenían precios más asequibles para los ejemplares de cierta calidad pero muy repetitivos (léase aguamarina, ciertos tipos de turmalina, Albita, Titanita en cristal pequeño, p.e.), pero en todos los ámbitos geográficos el ejemplar de calidad se mide ya en miles de euros y los de gran calidad (y algunos de no tanta) en decenas de miles.

[Carles Curto]

Otro sector que parece haber moderado los precios es el del mineral alpino. Se podían encontrar excelentes “gwindels”, de excelente color, brillo y transparencia, en matriz o sin ella, entre los 150 y 350 euros y lo mismo se puede decir de la adularia (la Hematites sigue “picando”).

Hago cita aparte de la Hematites (martita) argentinas de Jordi Fabre (no son estrictamente novedad) y no es por hacerle la pelota, diría lo mismo si hubiera sido un perfecto desconocido, excelente calidad, estéticas, a precios muy competitivas y claramente mejores que las de los comerciantes argentinos que suelen traerlas.

La exposición principal de este año, Australia, ha sido francamente decepcionante. Si dejamos de lado un par de ejemplares excepcionales de Oro nativo y la colección de ejemplares de Atacamita, poco más. En la feria, a la venta pública había ejemplares mejores de Crocoita y de Ópalo noble. También esperábamos más de Broken Hill y de Cobar. Desde mi punto de vista la exposición más decepcionante de los últimos años.

En resumen el Munich de este años nos deja el agradables regusto de haber disfrutado de una feria divertida, con muchas posibilidades de buenos hallazgos a precios razonables, digamos que del “estandarte” medio-alto español, para entendernos y precios claramente al alza para los “top samples” (los bolsillos de los museos, incluso museos de relumbrón, ya no llegan a ellos).

¡Buena cerveza y hasta el año que viene!

[Pep Gorgas]

Como suele ocurrir, todavia no se ha inventado que el que hace la foto salga en ella, a no ser corriendo mucho o disparando como Lucky Luke ( mas rápido que su sombra), para arreglar esto, adjunto un par de fotos del fotografo, Carles, para que veais que es cierto que estuvo en Munich. (y una de turmalinas para el que les guste)

Pep

[Carles Curto]

Capítulo nuevo, los tratamientos y falsificaciones:

Como novedad, cristales rombododecaédricos de Lazurita de Irán perfectamente pulidos.
En aumento, tratamiento con radiación de rayos gammma de algunos minerales, más o menos gema, de Pakistán, especialmente turmalinas polícromas, que aumentan considerablemente la intensidad y el contraste de color, y topacios, que toman un hermoso color tostado que contrasta con la matriz blanca. No me consta que se irradien las aguamarinas, en todo caso el color azul de la mayoría parece natural.
"Heliodoros" de kazakxtán, de un hermoso color amarillo (algunos conservan aún, en su base, el ligero color azul original.
y otros (¡ojo en Expominer!) cristales de Brookita pegada a la matriz, cristales de Hematites, de Nador, pegados a la matriz, cristales de turmalina "reparados", sulfuros chinos muy acidificados (observad bien la Calcita, si la hay) y otros etcéteras ya comentados en anteriores posts.

[Carlos J. Rodríguez]

En este tipo de eventos de prestigio (o eso pensamos algunos),¿ no hay una "autoridad" que prohiba exponer o expulsar a estos individuos con dicha mercancía tratada "falsificada"?, bueno, a menos que indiquen o advirtiendo a la clientela que ha sido pegada, coloreada, ... con fines decorativos, no coleccionistas.

En un evento así, y si intentar colar dicho fraude, yo los considero como los Topmanta, y por tanto ¡Paredón!.

Saludos,

[dani25]

Hola Carles,

Me he quedado sorprendido de lo que explicas referente a las falsificaciones. Parece que cada día es más habitual.

Lo peor es que para los no expertos (como yo) muchas veces es difícil distinguir estas piezas alteradas, modificadas o arregladas. Yo personalmente, como cada año, pienso ir al Expominer con la idea de adquirir algunas piezas nuevas. Que nos aconsejas para no comprar piezas tratadas?Aunque nunca está bien generalizar, básicamente son los vendedores paquistanís los que poseen este material?

Gracias por la ayuda

[Carles Curto]

Existe un reglamento de la feria (también en las ferias españolas). ¿Quién le pone el cascabel al gato?

[Carles Curto]

Algunos pakistanís sí. Sucede que están relacionados conel mercado alemán de gemas, además de minerales y supongo que lo que les funciona para la gema tallada (casi seguro que los tratamientos se hacen en Alemania, no en Pakistán) les funciona también para el mineral en bruto. Muchos de los comerciantes, al menos los más acreditados, advierten al posible comprador de los tratamientos efectuados (cosa que no suele suceder con los chinos y marroquíes).
Quiero puntualizar que las reparaciones (esencialmente en turmalinas de procedencias muy diversas, básicamente brasileñas, pakistanies y rusas) se suelen encontrar en proveedores reputados de Europa y Estados Unidos, se dan en ejemplares de gran categoría y el vendedor suele advertir al que pregunta por ellos de en que lugar se ha efectuado la reparación).

[Carles Curto]

Por cierto, me olvidaba. En Munic se han vuelto a ver en, cierta abundancia, granates Almandino austriacos con las caras manipuladas, pulidas o rehechas. La diferencia con los cristales en su forma natural resulta evidente, pero el aficionado poco experto puede caer en el engaño.

[Pep Gorgas]

Respecto a las piezas reparadas, o restauradas, como se quiera decir, para mi lo importante es que el comerciante avise, y que el precio baje. A partir de aqui, cada qual con su criterio de colección. Al que no se le haya roto una pieza, limpiándola, o simplemente observandola, que tire la primera piedra (nunca mejor dicho). Creo que la búsqueda de la perfección es en si misma una quimera. Y a veces, si entiendes que eso puede pasar, es un buen camino para acceder a piezas que de otra forma serian totalmente inalcanzables, al menos para mi.
Resumiendo, a veces, aceptar el defecto nos hace mas humanos.

Pep

[Carlos J. Rodríguez]

Estoy contigo, Pep, que avisen de la reparación, irradiación (entonces ya no es fraude) y cada uno que decida. Lo grave, y como dice Dani, sin llegar a ser un entendido o un mismo entendido, que te los colen.

Yo desde luego, tengo en mi colección "reparados" por mi mismo ya que al intentar recogerlos o al partir un peñasco, casca el cristal que no veias o querias partir, entonces cola de carpintero y pegar los trozos y a la matriz, pues a mi me dice más el mineral si está en su matriz que suelto, y los tengo con mucho cariño, y así lo comento a los que se los enseño. Son pocos, pero son manipulaciones que para mi colección lo veo más interesante que trozos sueltos de berilo o apatito, por ejemplo, siempre que las piezas encajen exactamente como en un puzle.

Otra cosa es cuando hay pasta por medio. ¿o no jode comer unos percebes vacios y pagar por ello?. Un saludo

[Pep Gorgas]

Una de las compras de Munich (no todo han de ser piedras) fué un libro que me recomendó Carles, de Pierre Bariand, conservador del Museo de la Universidad Pierre et Marie Curie de Paris, y uno de los mejores minerólogos que ha dado Francia. Bien, pues leyendo el libro, lleno de anecdotas y recuerdos me encontré con este párrafo: (aunque insisto que el Francés se parece al Gallego, mejor traduzco):
" Me mostró un remarcable cristal de Turmalina de cerca de 20cm de longitud, el color variable del verde al rosa y con la terminación de una multitud de prismas pegados unos a otros, evocando la arquitectura de las ciudades Americanas, de ahi el nombre que le di, Manhattan. El precio solicitado era demasiado elevado, teniendo en cuenta que la cartera estaba vacia.
Este cristal habia sido fracturado en dos partes en el sentido de la longitud, pero encajaban perfectamente, constituian pues dos piezas. Yo estaba interesado por la mas pequeña, pero no podia pagar los 4 mil dólares que pedian. Roger Titeux compró las dos piezas, resevándome la que yo queria y ya pasariamos cuentas en Paris. Yo no habia olvidado el otro fragmento del cristal, que pegado al mio constituian una de las mejores turmalinas conocidas. Seis años mas tarde, Mitterand nuevo presidente de la república, lanza un proyecto de ley controvertido: taxar las obras de arte para pagar impuestos. Emoción entre los coleccionistas. Algunos objetos son disimulados, otros vendidos al extranjero. El poseedor del otro fragmento se asusta y me propone cambiar la turmalina por otros minerales menos voluminosos, mas fáciles de esconder.
Caso cerrado, los dos fragmentos se reunen al fin, sin que apenas se note."
Si alguien tan importante, se preocupó tanto por "pegar, restaurar, recomponer, o como se llame, un cristal, no debe ser tan malo....
Pep

[Carles Curto]

Efectivamente, no se debe confundir reparación con tratamiento y con falsificación.
Existe un paso previo importante, que haya o no ánimo de engaño. Los tratamientos de mixtificación (productos artificiales, sintéticos, irradiados) deben ser claramente advertidos para que el posible cliente no caiga en un error. Desde mi punto de vista son MINERALÓGICAMENTE inadmisibles (a menos que se guarden como elementos de comparación con los naturales).
Los reparados, estoy con vosotros, son otra historia, pero también deben advertirse de forma clara.