Tras unos meses sin gato por defunción del titular, la casa ...
Descripción: Tras unos meses sin gato por defunción del titular, la casa se llenó de ratones. Se les oía corriendo por el interior del falso techo, por el hueco de la chimenea y hasta dentro del horno. Un día el coche dejó de funcionar, no arrancaba ni empujando. Tras una semana en el taller y muchas horas de trabajo resultó que las ratas se habían comido unos cables de lo mas inaccesible. Por fin una amiga me regaló a Flow. Como estaba capado y se había criado en un piso, advertí a mi amiga que no estaba seguro de que sobreviviera mucho tiempo en el campo. La primera noche le dejé dormir en casa para que se hiciera a su nuevo hogar pero a medianoche se puso a maullar y lo saqué al exterior. A la mañana siguiente, ni rastro del gato. Tampoco al otro día ni el siguiente. Ya lo daba por desaparecido cuando una semana más tarde lo sorprendo comiendo las sobras del perro. Al verme sale corriendo y se esconde bajo un lentisco. Me costó bastante domesticarlo porque es muy desconfiado, virtud que le ha ayudado a sobrevivir hasta el día de hoy. Es el primer gato capado que he tenido y la verdad es que son todo ventajas. No va echando meadas para marcar territorio y no lo he visto pelear jamás. Y, por supuesto, al poco de llegar desaparecieron los ratones. Se crió en un piso y está capado pero conserva intacto su instinto cazador.